Blogia
revuelta

El NO de Holanda

El NO de Holanda

Bien, viendo los resultados del referéndum holandés se ha comprobado que como preveían los pronósticos ha triunfado el NO.

Las causas son de lo más variadas, se suele comentar los grados de "euroescepticismo" existente en los países fundadores de las Comunidades Europeas, pero quizá en este caso tengamos que hablar más bien de cuestiones como el peso de los Estados-nación dentro de la propia UE y en el proceso de integración europeo.

Si bien es cierto el referéndum no ha tenido carácter vinculante, sino que ha sido simplemente consultivo, sí ha tenido lugar el compromiso político del gobierno y del parlamento en respetar la decisión si existía una participación notable de la población holandesa (algo poco habitual por regla general pero que en esta convocatoria ha sido bastante más significativa que en otras ocasiones).

Hay que tener también en cuenta el efecto de los propios partidos políticos holandeses, los cuales en cierto modo han orientado ya el sentido del voto en función de sus intereses, alegando argumentos como el de que la constitución pone en peligro la identidad del pueblo holandés, o que este proceso hará perder peso e importancia a Holanda en la toma de decisiones, etc...

Pero en todo esto ha tenido bastante que ver el mismo sistema de partidos holandés, en el que existe una heterogeneidad muy considerable de organizaciones con representación parlamentaria, ya que el porcentaje electoral existente para alcanzar algún escaño es ínfimo, por ello, al haber una gran cantidad de partidos representados, y al mismo tiempo tener mucho peso político, siendo mayoritario el NO entre estos, ha podido más esta opinión sobre la sociedad holandesa que el SÍ del gobierno.

Destacable es también el alto grado de participación con respecto a otras convocatorias, en esto han podido influir dos cosas: los resultados de Francia que han podido tener un efecto de inercia en la sociedad holandesa por las repercusiones a nivel europeo, y por otro la importancia que desde los propios partidos holandeses se le ha dado a la convocatoria. No hay que olvidar que en la sociedad holandesa existe una más que explícita indiferencia hacia la política, que se manifiesta en la mayor parte de las concurrencias electorales con una alta abstención, de ahí que existan unos porcentajes muy reducidos para poder alcanzar representación parlamentaria.

El problema que se puede plantear a corto plazo con lo del tratado constitucional, es, fundamentalmente uno, y es el contenido de la propia constitución, ya que peca en demasía por neoliberal y antisocial. En otro lugar el problema que se presenta es el de la propia integración, no de esta misma como proceso, sino la forma en la que se ha estado llevando todo este tiempo, teniendo como base de la misma a los Estado-nación.

Las divisiones verticales que constituyen los Estado-nación en Europa son el problema que hay que superar para alcanzar una definitiva unión política. La integración ha sido durante estos años fundamentalmente económica, ese ha sido su defecto. No vamos a negar el hecho de que dicha integración ha sido necesaria de cara a buscar otros objetivos no menos importantes, pero el error estriba en fundamentar toda la integración en el aspecto meramente económico. ¿por qué?, porque sencillamente los políticos europeos siguen siendo vasallos de América, y al mismo tiempo las oligarquías económicas que tienen fuertes vínculos con Wall Street y prefieren mantener la división actual en Estados para conservar sus influencias y su poder, junto a su estructura de intereses ya consolidada, algo que peligraría en caso de que existiera un poder político central europeo. Mientras Europa no alcance su unidad política seguirá siendo un apéndice del imperialismo americano, una colonia de los EE.UU.

¿Consecuencias de este NO holandés?, la integración no se quebrará, podrán retrasarla y hacer que algunos aspectos de esta cambien, y será casi seguro esto lo único que se consiga. Se cambiará el contenido de la constitución para intentar contentar a la población, y se volverán a repetir las elecciones cuantas veces hagan falta hasta que salga el sí. Y en caso contrario los países que se queden fuera seguirán funcionando con el tratado de Niza en sus relaciones comunitarias.

Pero en mi opinión, creo que ha contado demasiado el peso de los Estado-nación en dos sentidos, en el conjunto del proceso de integración europeo y a la hora de pensar en clave nacional. Los Estados se mueven por intereses particulares, son puro ego, y esto forzosamente se transmite a la población quienes comienzan a dejar de pensar en clave europea para hacerlo en clave estatal. Debido a que los Estados son estructuras políticas con intereses propios y en muchas ocasiones contrapuestos a los de los demás Estados, ello hace que la integración europea a nivel político no sea efectiva pues dichos Estados reservan para sí importantes parcelas de soberanía. A esto se le suma el enfrentamiento derivado de esta contraposición de intereses, lo que propicia todavía más la dominación de Europa por parte de fuerzas externas y ajenas a ella. Si los Estados ya de por sí dividen Europa, además de esto todavía la enfrentan contra sí misma a nivel interno.

Sólo la completa y definitiva desaparición de los Estado-nación de Europa será factible la unión política de esta. Es en definitiva darle al proyecto europeo un carácter más popular y más social, algo que esta casta de políticos estériles y oportunistas electorales no son capaces de realizar ni van a poder pues su servidumbre es para con los EE.UU., por ello Europa necesita hombres resueltos y audaces, necesita hombres de acción, pues sólo ellos harán posible la definitiva unificación europea.

0 comentarios